martes, 10 de marzo de 2015

Carácter Real

Rt Hon Marcus Garvey
Carácter Real

Cuando se pierden las riquezas, nada se pierde,
Cuando se pierde la salud, algo se pierde,
Cuando se pierde el carácter, todo se pierde.

El hombre de carácter genuino es el gran constructor,  no sólo es el constructor de sí mismo, sino, de acuerdo a sus oportunidades,  construye su entorno. Construye su medio ambiente,  su comunidad,  su país y, algunas veces, ayuda a construir el mundo.

La mayor  posesión del hombre es el carácter. Él bien puede afrontar la perdida de riquezas, e incluso de su salud, porque si  tiene carácter,  puede recobrarlas.  Pocos hombres prestan atención a los elementos naturales más esenciales del buen vivir. Si más personas  se dedicaran a desarrollar su buen carácter habría menos miseria y menos infelicidad en el mundo.

En todos los  caminos y esferas de vida,  los hombres que han hecho conquistas tuvieron  buen carácter, es decir, fueron los hombres que encontraron lo más noble de ellos mismos, aquellos que sentían que el autodesarrollo y el autocrecimiento son la mayor expresión de una existencia normal. Los que fracasaron  en desarrollar un carácter meritorio se  convirtieron en los rezagados a quienes todos dejan a un lado del camino. 

Con un carácter genuino puedes destruir un mundo y reconstruirlo, puedes conocer la adversidad y reírte de ella en el camino de regreso a la prosperidad. Sólo un cobarde carente de carácter es quien desciende permanentemente. El hombre con mérito genuino, con apremio de honestidad, con confianza en sí mismo, de nobleza, que no ve la derrota ni admite discapacidad o barreras, debe ascender a la superficie.

¿No podemos inspirar a los jamaiquinos a desarrollar el más fino y noble carácter que los harán edificadores, no sólo de ellos mismos sino de su país? ¿No podemos señalar las hazañas de otros hombres que se han alzado por sí mismos desde la oscuridad a lo más alto de la utilidad humana a través del desarrollo de un carácter real?

La oportunidad de ascender sobre el nivel de los hombres desafortunados es para todo aquel que se ennoblezca a sí mismo forjando lo bueno que hay dentro de él. Por favor, saca afuera lo bueno que tengas en ti. Nunca la naturaleza le hace tan falto de alma ni tan carente de carácter como para no tener una virtud que pueda ser traída a la superficie. 

Jamaiquinos haraganes, tímidos, lerdos, faltos de carácter: dense cuenta de que ustedes tienen algo que vale la pena. Busquen dentro suyo y encuéntrenlo. Un carácter noble  significará una vida noble a ser vivida para bendición de la humanidad. Luego de leer esto decídanse a salir de ustedes mismos y dejar que el mundo conozca de ustedes y a ustedes. Ustedes pueden hacerlo!


Rt Hon Marcus Garvey


Articulo publicado en el New Jamaican, 14 de enero de 1933